1 Juan Canter, Las sociedades secretas y literarias, en Historia de
2 Enrique Williama Alzaga, Las dos revoluciones: 1° de enero de 1809-25 de mayo de 1810, en
3 Memoria que Juan José Castelli y otros elevaron a
4 “A. raíz de los sucesos de 1808, en España se planteó una lucha ideológica entre un par de fuerzas principales —conservadores y reformistas—, pero hallándose integrada esta última tendencia por quienes pretendían innovar rompiendo con el pasado —los innovadores— y los que aceptaban la necesidad de renovar sin renegar del pasado, pero sin aferrarse con intransigencia a todo lo que el pasado llevaba consigo —los renovadores—”. (Federico Suárez Verdaguer, Conservadores, innovadores y renovadores, en las postrimerías del antiguo régimen, Pamplona, 1955, citado por Carlos Alberto Floria, El liberalismo en la época de la «mancipación, en Criterio, Buenos Aires, 13 de agosto de 1959).
5 Ricardo Zorraquín Becú, Los grupos sociales en la revolución de Mayo, en Revista Historia, N” 22, Buenos Aires, 1961, pág. 50.
6 Jaime Delgado, La independencia hispanoamericana, Ed. Instituto de Cultura Hispánica, Madrid, 1960, pág. 37.
7 Ibídem, pág. 35.
8 Ricardo Zorraquin Becú, ob. cit., pág. 48.
9 Robertq Etchepareborda, La diplomacia de Portugal ante
10 Ricardo Zorraquín Beca, ob. cit., pág. 62.
11 Carlos Roberts, Las invasiones inglesas del Río de
12 Julio César Chaves, Castelli el adalid de Mayo, Ed. Leviatán, Buenos Aires, 1957, Págs. 76-77.
13 Memorial de Padilla a Wellesley, en Carlos Correa Luna, Figuras menores de
14 José María Sosa., Del municipio indiano a la provincia argentina, Ed. Instituto de Estudios Políticos, Madrid, 1958, Pág. 77.
15 En Carlos Alberto Pueyrredón, 1810,
16 Copia de puño y letra de Mitre, en Museo Mitre, Arm. E, Cajón 2, Pieza 1, N° de orden 14.
17 Ignacio Núñez, Noticias Históricas, pág. 245.
18 Apostillas a la carta de Saavedra a Viamonte, del 27 de junio de 1811, cit. por Baúl A. Molina, Una carta de Saavedra sobre
19 Bartolomé Mitre, Historia de Belgrano y de
20 José María Rosa, ob. cit., pág. 78. Como escribe Vicente D. Sierra: “La primera invasión inglesa no derrotó a la ciudad, sino al régimen que la gobernaba” (Historia de
21 En Revista Historia, Nº 20, Buenos Aires, 1960, paga. 312-13. Sobre el carácter masónico que pudo haber tenido este grupo, cabe realizar dos citas contrapuestas, una del historiador Juan Canter, que estudió profundamente este tema; la otra, de, un entusiasta defensor de la acción de
22 General Enrique Martínez, Observaciones flechas a la obra póstuma Del señor Ignacio Núñes, en Biblioteca de Mayo, t. I, págs. 526-527.
23 En Juan Canter, Una carta justificativa Se Cornelio Saavedra, en Boletín. del Instituto Bonaerense de Numismática y Antigüedades, Bs. Aires, 1943, Ano I, No 1, págs. 73-84. Puede, agregarse también el testimonio de Alejandro Gillespie, quien dice al respecto: “Durante la secuela de estos acontecimientos [las invasiones inglesas] parecía que teníamos en la ciudad algunos amigos ocultos, pues casi todas las tardes, después de oscurecer, uno o más ciudadanos criollos acudían a mi casa para hacer el ofrecimiento voluntario de su obediencia al gobierno británico y agregar su nombre a un libro, en que se había redactado una obligación”. Y más adelante agrega: “de los seis miembros que constituyeron la primera junta revolucionaria de Buenos Aires, tres se registran en esa lista, y no dudo que cuando nuestro honor nacional admita el libre comercio con esos estados que parecen hoy haber conquistado su libertad e independencia, otros que se encuentran en la misma serán identificados ocupando altos puestos de confianza en aquella república naciente”.
24 Enrique de Gandía, 'Nueva Historia de América, Ed. Claridad, Buenos Airea, 1946, pág.
25 Ibídem, pág. 111.
26 Ibídem, pág. 118.
27 Ibídem, pág. 113.
28 Bartolomé Mitre, ob. cit., pág. 77. Sobre la actitud equivoca de Liniers sabe hacer un paréntesis. “Ricardo Caillet Bois, en la crítica que hito a la obra de Aldao (Carlos A. Aldao, Nuevos datos sobre el general Miranda y las invasiones británicas al Río de
Otro documento, un anónimo referente a las últimas noticias recibidas desde Buenos Aires el 8 de mayo de 1809, publicado en Buenos Aires en 1912 (Facultad de Filosofía y Letras, Sección Historia, Documentos relativos a los antecedentes de
No obstante —como lo admite el mismo de Gandía—, es evidente que Liniers se inclinaba más hacia una independencia con la protección francesa.
29 Enrique O. Corbellini, ob, cit., T. I, pág. 289.
30 En Ariosto Fernández, ob. cit., págs. 83-87.
31 Instrucciones de Cornelio Saavedra a su apoderado en el juicio de residencia, del 3 de agosto de 1814, en Revista Historia, N” 18, Buenos Aires, 1960, pág. 151.
32 Manuel Belgrano, Autobiografía, en Biblioteca de Mayo, Colección de obras y documento para la historia argentina, Buenos Aires, 1960, T. II, pág. 963.
33 Facultad de Filosofía y Letras, Documentos relativos a los antecedentes de la independencia de
35 Enrique de Gandía, Orígenes desconocidos del 25 de mayo de 1810. Ed. Orientación Cultural, Buenos Aires, 1960, pág. 70. Al tomarse prisionero a Liniers en Córdoba, en agosto de 1810, se afirmó que se le encontraron encima oficios franceses.
38 Bartolomé Mitre, ob. cit., pág. 125.
37 Carta de Jose Presas, secretario de
38 Ibídem, carta de fecha 21 de setiembre de 1808, pág. 104.
39 Biblioteca de Mayo, T. V, pág. 4306.
4o Cornelio Saavedra, Memoria Autógrafa, Ed. Emecé, Buenos Aires, 1944, págs. 24-25.
41 Apostillas a la carta de Saavedra a Viamonte, cit.
42 Carta de Saavedra a Viamonte, cit.
43 General Enrique Martínez, ob. cit., Biblioteca de Mayo, t. I, pág. 528.
44 Francisco Seguí, Los últimos cuatro años de la dominación española, en Biblioteca de Mayo, T. I, pág. 99.
45 Cit. por Roberto H. Marfany, El pronunciamiento de Mayo, Ed. Theoría, Buenos Aires, 1958, Ap. II, pág. 89.
46 Cit. por Roberto Etchepareborda, Entretelones del proceso carlotino, ed. Cit., pág. 100.
47 Norberto Quirno, Documentos relativos, pás. 348.
48 Enrique C. Corbellini, ob, cit., T. I, pág. 308.
49 Enrique de Gandía, Nueva Sutoria de América, ed. cit., pág. 121.
50 Enrique Williams Álzaga, Las dos revoluciones, art. cit.
51 Dámaso Uriburu, Memorias, en Biblioteca de Mayo, T. I, pág. 630.
52 Cit. por Enrique Williams Alzaga, en Revista Historia, Nº 22, pág. 37.
53 Enrique de Gandía, Nueva Historia de América, ed. cit., pág. 107.
54 Manuel Belgrano, Autobiografía, ed. cit., pág. 964.
55 En el Informe de
56 Archivo General de
57 Ibídem, pág. 539.
58 Bartolomé Mitre, ob. cit., pág. 130.
59 Martín Rodríguez, Memorias, en Museo Histórico Nacional, Memorias y Autobiografías, Bs. As., 1910, t. I, pág. 128.
60 Ariosto Fernández, Manuel Belgrano y
61 Vicente D. Sierra, ob. cit., págs. 482-84.
62 Cit. por Carlos Alberto Pueyrredón, ob. cit., pág. 817.
63 Roberto H. Marfany, Vísperas de Mayo, ed. Theoría, Bs. As., 1960, Pág. 68-70.
64 Martín Rodríguez, Memorias, ed. cit., pág. 127.
65 Cornelio Saavedra, memoria Autógrafa, ed. cit; Págs. 43-44.
66 Roberto H. Marfany,
67 Vicente Fidel López, La gran semana de Mayo, Ed. Universitaria de Buenos Aires, Bs. As., 1960, pág. 51.
68 Crónica anónima en el Archivo General de
69 Nicolás de Vedia, Memorias cit. por Bartolomé Mitre en Nuevas comprobaciones históricas, Bs. As., 1882, pág. 172.
70 John Miller, Memorias, t. I, pág. 59, cit. por Julio César Chaves, ob. cit., pág. 143.
71 Carta de los Ministros de
72 Informe procedente de Salem, puerto de Massachusetts, del sobrecargo. del bergantín Venus, Nathan Cook, del 24 de agosto de 1810, publicado en el Connecticut Courant del 29 de agosto de 1810, en Hartford, Estados Unidos. Citado por Manfred Shonfeid, Historia argentina a través de un viejo diario norteamericano, en “
73 Vicente Fidel López, ob. cit., pág. 54. Corbellini, advertido de esta maniobra, apunta lo siguiente: “...Chiclana, Rodríguez Peña, Vieytes, etc., eran hombres que conocían perfectamente las ideas revolucionarias, y que apoyaron al partido moderado premeditadamente y por táctica” (Ob. cit., t. II, págs. 142-143).
74 Enrique C. Corbellini, ob. cit., t. II, pág. 200.
75 Baltasar Hidalgo de Cisneros, Informe a S. M., 22 de junio de 1810, en Archivo General de Indias, publicado en facsímil por C. A. Pueyrredón, ob. cit., Pág. 583.
76 Juan Canter, Las sociedades secretas y literarias, ed. cit., pág. 257.
77 Enrique C, Corbellini, ob. cit., t. II, Pág.
78 Bartolomé Mitre, ob. cit., pág. 147.
79 Enrique C. Corbellini, ob. cit, t. II, págs. 62-63.
80 En carta atribuida a Manuel Ramón de Pazos, cit.
81 Nicolás de Vedia, Memorias, cit. por Bartolomé Mitre en Nuevas comprobaciones históricas, Bs. As., 1882, Pág. 173.
82 Enrique de Gandía, Orígenes desconocidos del 25 de maya de 1810, ed. cit, Págs. 232-33.
83 Ricardo Zorraquín Becú, ob. cit., pág. 43.
84 Ibídem, Pág. 55.
85 Paul Groussac, ob. cit., pág. 335.
86 Enrique C. Corbellini, ob. cit., t. II, pág. 83.
87 Jaime Delgado, ob. cit., Pág. 107.
88 Tomas Guido, Reseña histórica de los sucesos de mayo, en Museo Histórico Nacional, Memorias y Autobiografías, Bs. As., 1910, t. I, pág. 12.
89 Baltasar Hidalgo de Cisneros, Informe cit.
90 Archivo General de
91 Francisco Saguí, ob. cit., pág. 121. Narciso Binayan, en un artículo publicado en “
92 Gervasio Posadas, Autobiografía, en Biblioteca de Mayo, t. II, pág. 1410. Llama la atención que entre nosotros no se haya admitido a esta Junta presidida por el Virrey, como el primer gobierno revolucionario, cuando, además de las razones apuntadas, constituye un hecho similar al que tuvo lugar en Venezuela o en Nueva Granada. En efecto, el 19 de abril de 1810 se formó en Caracas una Junta que fue presidida por el entonces Capitán General, brigadier Vicente Emparán; y el 20 de julio, en Bogotá, se constituyó otra Junta, bajo la presidencia del Virrey de Nueva Granada, Don Pedro Amar y Borbón. Ambas, como la de Buenos Aires, fueron de duración efímera, pero no por ello se deja de reconocerlas como el paso inicial dentro del proceso que condujo al triunfo de la causa revolucionaria. Probablemente la omisión también se deba al hecho de que se nos ha acostumbrado a llamar a la revolución como del 25 de mayo, fecha en la que, en realidad, culminó el proceso que se había iniciado el 21 con la manifestación en la plaza Mayor. En el Diario de un testigo, publicado por Marfany, se habla de la revolución del 21 y no del 25, y el Virrey Abascal, del Perú, la llama revolución del 20 de mayo. Por otra parte, dentro de nuestra evolución histórica, es la única revolución que se conoce por la fecha de culminación y no por la de iniciación, v. gr.: 3 de abril de 1815, 1 de diciembre de 1828, 11 de octubre de 1833, 26 de julio de 1890, 16 de setiembre de 1955.
93 Paúl Groussac, ob. cit, págs. 346-47.
94 Tomás Guido, ob. cit., pág. 14.
95 Juan Canter, ob. cit., pág. 259.
96 Ricardo Zorraquín Becú, ob. cit., Pág. 50.
97 Carta escrita en Buenos Aires el I9 de junio de 1810, probablemente por un oficial de la marina inglesa, testigo ocular de los acontecimientos que narra. Todos los diarios franceses reprodujeron dicho documento y por su intermedio toda la prensa continental europea. Fue publicada en Londres el 31 de agosto de 1810, en el periódico “Star”. En León Baidaff, Las primeras noticias de
98 Córreio Brasiliense, vol. V, págs. 238-42. En Alceu Amoroso Lima, un precursor brasileño de la revolución de Mayo, en
99 Manuel Belgrano, Autobiografía, ed. cit., pág. 967.
100 Carta de Saavedra a Viamonte citada.
101 Paúl Gronssac, ob cit., pág. 345.
102 Juan Canter, Las sociedades secretas y literarias, ed. cit., pág. 259.
103 Enrique C. Corbellini, ob. cit., t. II, pág. 92.
104 Carta de Ramón Manuel de Pazos a Francisco Juanicó, citada.
105 Juan Canter, Las sociedades secretas y literarias, ed. cit., pág. 227.
106 Archivo General de
107 En carta de Guillermo White a Pedro Feliciano Sáenz de Cavia fechada el 24 de mayo de 1819, se hacen las afirmaciones que consignamos (Archivo General de
108 Ricardo Levene, El 86 de Mayo, en Historia de
109 Carlos Roberts, ob. cit.
110 Manuel Moreno, Vida y memorias del Dr. Don Mariano moreno, en Biblioteca de Mayo, t. II, paga. 1236-37.
111 En
112 Enrique C. Corbellini, ob. cit., t. II, pág. 27.
113 Manuel Moreno, ob. cit., en Biblioteca da Mayo, t. II, pág. 1238.
114 No obstante, su nombre aparece incluido en una lista de comprometidos, que José María Romero sugirió al Virrey Cisneros deportar del país, días ante de
115 Ignacio Núñez, ob. cit., pág. 245.