El llamado "revisionismo" histórico ha tratado principalmente de rectificar los juicios adversos y abundantes sobre Rosas, ha dado origen también a una serie de trabajos polémicos en su mayor parte, salidos de la pluma de quienes ven en el gobernante de Buenos Aires, o bien un déspota semibárbaro que oprimió al país durante veinte años, o bien un hombre representativo de su época, con luces y sombras, sin duda, pero con hechos que pueden reivindicarlo ante la posteridad, no obstante los dicterios que le fueron prodigados desde 1831 hasta Caseros, y después de la caída y del ostracismo del discutido personaje.

El señor Busaniche tercia en la contienda, pero en forma objetiva y documental, presentando a Rosas a través de las opiniones de sus contemporáneos. Su juicio, ponderado y sobrio, aparece tal cual vez más con propósito de elucidación y exégesis, que para imponer su criterio al lector, en pro o en contra del personaje. La interesantísima documentación reunida ahora en volumen permitirá a los estudiosos confrontar las distintas apreciaciones de parciales y enemigos, de argentinos y extranjeros, y sobre todo, las reacciones de diversos temperamentos al ponerse en contacto inmediato con el hombre de carne y hueso, de fuertes pasiones, de premeditadas astucias, sentado en su sillón de mando o en plática amable con sus visitantes.

Los testigos de la época, que desfilan en esta revista de autores y que juzgaron a Rosas en los momentos más álgidos de la diatriba, son personalidades de autoridad intelectual, y si bien esta circunstancia podría oscurecer el problema que se debate, en orden a la debida interpretación de los hechos, no es menos cierto que de allí proviene el apasionante interés que este libro está llamado a despertar en los círculos de lectores aficionados a los estudios históricos.

Rosas en 1829

El único retrato que hay bastante parecido del señor general Rosas es uno que condescendió él que se hiciese en obsequio del caballero Sir Woodbine Parish...

Antonino Reyes.

Según contaba Mamá (Manuela Rosas de Terrero) la miniatura tiene el mérito especial de ser el único retrato que jamás permitió su padre que se sacara de él.

Manuel M. Terrero.

Según las personas que entonces me conocieron, es igual al original en aquel tiempo.

Juan Manuel De Rosas.

Colección Cúpula

Editorial Guillermo Kraft Limitada

Fundada en 1864

Buenos Aires