Lecciones de Historia Rioplatense
La votación
 
 
Allí terminaron las discusiones.

La votación fue por escrito y firmada por cada cual. Predominó el punto de vista de Saavedra cuyo texto original decía: “Que consultando la salud del pueblo y en atención a las actuales circunstancias, debe subrogarse el mando superior que obtenía el Excelentísimo señor Virrey en el Excelentísimo Cabildo de esta Capital, ínterin se forma la corporación o junta que deba ejercerla, cuya formación, debe ser del modo y forma que se estime por el Excelentísimo Cabildo y no quede duda que es el pueblo que le confiere la autoridad o mando.”

Para su autor, el pueblo era la milicia en armas que le respondía desde el 1° de Enero de 1809. No hablaba, desde luego, el lenguaje utópico de Rousseau. La mejor prueba es que delegaba en el Cabildo regular (y no en el abierto) la facultad de elegir “la corporación o junta” en sustitución del virrey. Su voto contó, por eso, con mayoría al obtener 87 adherentes.

Es importante destacar que sólo tuvieron éxito las propuestas prudentes y relativamente moderadas, siendo rechazadas las extremistas de cualquiera de los bandos en pugna. Así, la del Obispo Lué que propiciaba el “status quo” y la conservación del virrey, con el asesoramiento de un oidor, no tuvo ningún adherente. Igual ocurrió con la del doctor Melchor Fernández, para quien el pueblo “se halla —dijo— en estado de disponer libremente de la autoridad, que por detecto o caducidad de la Junta Central, a quien había jurado obediencia, ha recaído en él en la parte que le corresponde. y que en caso de subrogarse sea en el excelentísimo Ayuntamiento mientras se establece el modo y forma de gobierno...”

Dio también su parecer el teniente general Pascual Ruiz Huidobro, quien con algunas variantes, adhirió a las razones de Saavedra que hemos citado.

La tesis “legalista” que beneficiaba a los patriotas, anticipada por el jefe de Patricios el día 20 frente a Cisneros, triunfaba en esta primera escaramuza dando en tierra con los planes del partido español. Pero debía ser sólo por unas horas...