bravura patriota
El Consejo de Regencia que funcionaba en España designĂł virrey del RĂo de la Plata a Francisco Javier de ElĂo. Quien enviĂł fuerzas contra las poblaciones que habĂan reconocido a la Junta de Buenos Aires, reanudando el bloqueo naval de Ă©sta. Con el objeto de auxiliar a Belgrano, aislado luego de su derrota en TacuarĂ, se forma la primera flotilla naval argentina. Está compuesta por 3 barcos: la goleta “Invencible”, el bergantĂn “Veinticinco de Mayo” y la balandra “AmĂ©rica”, comandados respectivamente por Juan Bautista Azopardo, HipĂłlito Bouchard y ángel Hubac. La pequeña armada está a las Ăłrdenes de Azopardo y recibe su bautismo de fuego en San Nicolás, el 2 de marzo de 1811, siendo vencidos los nuestros, aunque se conducen con bravura, muriendo las dos terceras partes de ellos.
La insurrecciĂłn patriota contra ElĂo se extiende en la Banda Oriental. Al frente de tal resistencia pone la Junta a Belgrano, que conserva los restos de su ejĂ©rcito. Lo secundan los tenientes coroneles JosĂ© Rondeau y JosĂ© Gervasio Artigas. El 28 de febrero, tiene lugar el pronunciamiento de los gauchos orientales, conocido como “Grito de Asencio”. Sabedores de que su jefe indiscutido –Artigas– apoya a la Junta de Buenos Aires, toman el partido de Ă©sta y, ese mismo dĂa, ocupan la ciudad de Mercedes y luego la de Soriano. Otros caudillos menores logran sucesivos triunfos contra las fuerzas de ElĂo. Artigas, reforzadas sus tropas con 200 hombres que le envĂa Rondeau y 300 jinetes, reclutados por su hermano Manuel, vence a los españoles en Las Piedras y pone sitio a Montevideo. El 9 de marzo de 1811, se enfrentan en rudo combate fuerzas de Buenos Aires mandadas por Belgrano y las realistas del general Cabañas, junto al río Tacuarí. Los argentinos, que antes han sido derrotados allí cerca, en Paraguarí, se baten valerosamente contra un enemigo muy superior en número. Mientras continúa la batalla, resuenan incansables los redobles de un tambor. Quien bate el parche es un chico de 12 años, que se ha incorporado al ejército patriota al pasar éste por su pueblo correntino de Yaguareté Corá. Se llama, según dicen, Pedro Díaz, y cumple con su deber cabalmente, alentando a los soldados hasta que cae herido de muerte. La actuación de ese correntinito es un ejemplo de coraje y se lo recuerda como “El Tambor de Tacuarí”. |
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