Las noticias del triunfo patriota en la batalla de Ayacucho (1824) que selló definitivamente la libertad de América, coincidieron con la instalación de un Congreso General Constituyente en Buenos Aires donde las provincias mediante el dictado de
Aquella ley ordenaba que para entrar en vigencia
En diciembre de 1826, estando en mayorÃa los unitarios, lograban la sanción de una constitución.
Esta constitución aseguraba la libertad e independencia de toda dominación extranjera, y establecÃa el sistema de gobierno representativo y republicano, pero en contra al sentir de las provincias, establecÃa un régimen de carácter unitario y centralista.
El Poder Ejecutivo estarÃa a cargo de un Presidente que durarÃa 5 años en su cargo, y el Poder legislativo serÃa bicameral, integrado por diputados elegidos por el pueblo, y senadores que representaban a las provincias.
Las provincias tendrÃan un gobernador, elegido por el Presidente de la nación y que dependÃan de éste.
El marcado centralismo que inspiraba a la nueva Constitución fue suficiente para que obtuviera el rechazo de las provincias.